Cuando era niña mi mamá me ponía zapatos feos de amarrar, y me hacía nudos en las agujetas porque si no yo me los quitaba y andaba solo en calcetines. Yo soñaba con unos zapatos rojos con trabita y moñitos que vi en una zapatería, pero nunca me los compraron, mi abuela dijo que no combinaban casi con nada.
En la secundaria me compré unos zapatos muy cursis (pero yo pensaba que eran muy lindos), blancos con orilla azul y taconcitos, mas tarde pasé al calzado cómodo y chairo, después me mudé a los zapatos de plataforma, entre mas altas mejor, era estupendo medir 10 o 12 centímetros mas, o hasta 15, pero cuando pasaron de moda y me tuve que bajar de ellos fue horrible, lo que usualmente alcanzaba con facilidad ahora estaba muy alto, por eso empecé a usar tacones, pero eran incómodos y cuando me embaracé me mudé de nuevo a los zapatos cómodos y ya nunca los abandoné, pero aun me encantan los zapatos muy femeninos de tacones muy altos...pero no los compro porque no los usaría, solo me gusta verlos.
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7 comentarios:
Los pequeños grandes detalles de la femineidad...
Saludos n_n
Yo me quedo con los cómodos, pero recuerdo dos ocasiones en que sólo compré los zapatos por estilo, pues bonitos estoy seguro que un par le pudo parecer a muchas personas; pero el otro, no creo, pues era un par de zapatos diseñados para obreros, con cubo de hierro en l apunta y todo eso, me acostumbré a ellos, pero no puedo negar que los compré por parecerme bonitos. Y creo que no ouedo asegurar que nuca volveré a preferir belleza(en realidad estilo)en vez de elegir comodidad.
Lo que me encanta de cuando recuerdas de que usabas plataforma es que sabes que iban con tu estilo, y también recuerdas que te daban comodidad pues te acercaban a ciertas cosas por los centímetros de más. Saludos, y de verdad, que he disfrutado esta entrada.
Yo casi nunca uso tacones, solo cuando es estrictamente necesario, pero estoy de acuerdo, me encanta ver los lindos zapatos (casi todos los zapatos bonitos son incómodos) en Liverpool o Palacio, o en los pies de mi mamá o mis amigas.
Cuento breve:
Mr. Firglebinkle me pidió que le cuide la casa hasta que regrese. Me dio un manojo de llaves y me advirtió: nunca utilices la llave dorada, nunca abras la puerta trasera. Cuando volvió, le devolví las llaves intactas.
este palbo esta rarito....
yo nunca uso zapatos con tacon , de hecho no entiendo porque las demas mujeres se vuelven locas comprando zapatos, yo prefiero botas y tennis lo mas comodos posibles. será que no soy nada femenina ?? aunque de chiquita si recuerdo haber tenido unos zapatos consentidos.
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